Ambientación minimalista en un interesante café bar de la calle Bélgica donde podemos tomar algo a cualquier hora.
Cálido y acogedor, la Casa de los Martini es un interesante café bar que podemos encontrar en la calle Bélgica, muy cerca del cruce entre Aragón y Blasco Ibañez. Con una cuidada ambientación, el local intenta ser el complemento perfecto a Amadomío -un restaurante cercano- con precios más económicos, un horario más amplio, y un toque informal, donde podemos tomar algo a cualquier hora.
Para comer, la oferta de su cocina es variada e informal pero de calidad, con montaditos, ensaladas e ibéricos. Destacan sus minihamburguesas, sus huevos a lo pobre, y las tostas de la casa -que preparan con tomate, jamón y queso brie; con sobrasada y queso; o con tomate, pavo y parmesano-, todas ellas deliciosas y recomendadas.
Por supuesto para beber tienen buenos Martini, como el martini de la casa,
o el dry martini, pero también otros cocteles como el popular daiquiri, el bloody mary o el kik royal, además de infusiones variadas, y tres tipos de chocolates: normal, blanco y a la naranja. En cuanto a los vinos, tienen unas 20 referencias en carta, todos nacionales y valencianos, bien elegidos.
El local abre temprano, y
mucha gente también viene a desayunar, encontrándose la cafetera a pleno rendimiento haciendo cortados, café irlandés, nacionales... Además tienen buena repostería, como croissants y tartas caseras -elaboradas especialmente por el repostero de Amadomío-, y deliciosos postres como su brownie con mousse de chocolate y crema de naranja.
Decorada en tonos blancos
con un toque minimalista, en una de las esquinas de la sala hay una pantalla desplegable donde a veces hacen proyecciones de eventos deportivos especiales y conciertos. Merece la pena destacar su suelo de mosaico y la comodidad del mobiliario, no en vano en la Casa de los Martini intentan que la gente se sienta como en casa.
Para comer, la oferta de su cocina es variada e informal pero de calidad, con montaditos, ensaladas e ibéricos. Destacan sus minihamburguesas, sus huevos a lo pobre, y las tostas de la casa -que preparan con tomate, jamón y queso brie; con sobrasada y queso; o con tomate, pavo y parmesano-, todas ellas deliciosas y recomendadas.Por supuesto para beber tienen buenos Martini, como el martini de la casa,
o el dry martini, pero también otros cocteles como el popular daiquiri, el bloody mary o el kik royal, además de infusiones variadas, y tres tipos de chocolates: normal, blanco y a la naranja. En cuanto a los vinos, tienen unas 20 referencias en carta, todos nacionales y valencianos, bien elegidos.El local abre temprano, y
mucha gente también viene a desayunar, encontrándose la cafetera a pleno rendimiento haciendo cortados, café irlandés, nacionales... Además tienen buena repostería, como croissants y tartas caseras -elaboradas especialmente por el repostero de Amadomío-, y deliciosos postres como su brownie con mousse de chocolate y crema de naranja.Decorada en tonos blancos
con un toque minimalista, en una de las esquinas de la sala hay una pantalla desplegable donde a veces hacen proyecciones de eventos deportivos especiales y conciertos. Merece la pena destacar su suelo de mosaico y la comodidad del mobiliario, no en vano en la Casa de los Martini intentan que la gente se sienta como en casa.
LA CASA DE LOS MARTINIC/ Bélgica, 28 . 46021
963698048
Abierto todos los días de 08:00 a 01:30
15 euros de precio medio
Reportaje realizado para LaNetro www.lanetro.com en noviembre de 2006
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